La Lonja de Mar
Orgullo del gótico flamígero
Construida sobre la Pella -mercado de pieles, paños y harapos- bajo el reinado de Martín de Aragón, a partir de 1397 la lonja albergó el tribunal marítimo creado en 1388. Levantada según el modelo de las lonjas catalano-aragonesas, fue ampliada el doble hacia el oeste en 1540, hasta ser contigua al ayuntamiento. A mitad del siglo xviii, el monumento fue transformado en teatro por el conde de Mailly, en el xix se convirtió en posta de diligencias y luego en el Café de France. La carabela y el bajorrelieve en la fachada de la calle de los Mercaderes, con un San Juan Bautista de pie sobre las aguas, aún evocan el consulado de mar.